jueves, 25 de febrero de 2010

Trabajadora de dieciocho años busca un poco de justicia...

El martes pasado estuve en una granja lechera muy cerca de la frontera con Quebec: una trabajadora mexicana necesitaba un ride a la clínica, a unas cuatro millas y unos diez minutos (en coche) de su rancho, una distancia para ella infranqueable. Necesitaba que le vieran las manos enrojecidas, hinchadas, peladas, abrasadas con las que tiene que continuar trabajando once horas y media cada día.

Esperaba encontrarme con una mujer, y no podía creer que la chiquita delgada, jovencísima, que salió de su vivienda anexada al establo en sandalias de verano, caminado sobre la nieve y el lodo, sonriente y tímida,  fuera una mujer con marido (también trabajador en el rancho) y con dos años de vivir y trabajar en ese sitio inhóspito y peligroso para ambos (la migra circula constantemente por esas carreteritas rurales). Era, nos dijo, la primera vez que salía de la granja en los últimos seis meses. ¿Edad? Dieciocho años.

Join the Reform Immigration FOR America Campaign! http://www.reformimmigrationforamerica.org

2 comentarios:

Mariana dijo...

Gracias Irma y Leonora por compartir esta informacion.
Ya envie un fax a Welch y tambien visite el sitio de Reform Immigration For America para mostrar mi apoyo a la causa.
Ojala de una vez se reforme este asunto para que se haga justicia con las personas que sufren el bendito sistema inmigratorio.

Irma Valeriano dijo...

Y ojalá, Mariana, pudiéramos hacer algo por cambiar la percepción, perspectiva, opinión, etc., y educar a algunos que llegaron a este país como migrantes ellos mismos, y quienes no sólo no apoyan esta causa, sino que se unen al coro de los que condenan a quienes cruzan la frontera sin documentos prácticamente imposibles de conseguir... ¿puedes creer que tal cosa es posible? ¡pues lo es, y uno se pregunta dónde dejó esa gente la cabeza y el corazón! :(